La ciudad nos recibio de la mejor manera; conociendo al Papa en vivo y en directo en la plaza San Pedro. Muchisima gente estaba ya en la plaza cuando nosotros llegamos y a las 10.30am, muy puntual, llego el Papa Benedicto en el "papamovil", y recorrio parte de la plaza saludando a la gente, que gritaba, y algunos lloraban, muy emocionante. Aprovechamos que la multitud estaba ahi, locales y muchos turistas, para irnos antes de que terminara de hablar, al Museo del Vaticano, donde esta, despues de recorrer bastante dentro del museo, la Capilla Sixtina. No se podia sacar fotos, pero claro que la gente no hace mucho caso, sobre todo los chinos, imaginense, asi que Ceci quizo copiarlos y lamentablemente tenia a un guardia de seguridad al lado, que la invito a retirarse...Pobre ceci, jeje!
No paramos la pata ni un minuto, es que hay realmente mucho para ver, y aca si que no nos queremos perder de nada.
Fuimos a la Plaza Navona, con la Basilica de San Agnese, y la fontana di quatri fumi, que hace homenaje a los cuatro rios mas importantes de la epoca; uno de ellos aunque no lo crean es el Rio de la Plata, y la fontana del moro.
Tambien visitamos uno de los edificios mas esperados, El Panteon de Agripa, es increible por dentro. Por supuesto que tambien a la Fontan di Trevi, de dia y de noche, donde obvio que tiramos la monedita y pedimos el deseo correspondiente. El Coliseo y el Foro romano, que nos llevaron casi todo un dia recorrerlos.
Entramos a varias Iglesias, San Carlos de las Cuatro Fuentes, y las fuentes de las cuatro esquinas de las calles que ahi se cruzan, la Santa Andrea de la Quirinale (en esta habia un casamiento, y Aga no tuvo mejor idea que pasarse justo por delante de la camara mientras los novios iban caminando del altar hacia la salida! les arruino el video!), la San Ivo a la Sapienza, y la Iglesia del Gesu, muy impactante en su interior todo dorado y con un espejo que te permitia ver las pinturas en el techo de la misma.
Fuimos a la Piazza de la Rotonda, la plaza España, la plaza de la republica, y la Plaza del campidoglio de Miguel Angel. Para rematar nuestro dolor de piernas y agotamiento, el viernes fuimos a la Basilica de San Pedro y subimos hasta la cupula, 511 escalones para subir, y lo mismo para bajar, pero la vista de la iglesia desde alli arriba, y de la ciudad desde un poco mas arriba todavia, hizo que valiera la pena cada escalon! Asi nos despedimos de una de las ciudades que mas disfrutamos de recorrer y de comer por supuesto. Las pizzas de gustos para todos los gustos, los calzone, la lasaña, los helados, el lemonchelo, todo muy bueno!!